viernes, 17 de abril de 2009




A veces nos hundimos en un vaso. ¿Qué digo? El 99% de las veces que nos ahogamos, es en un vaso. ¿De agua? Y una mierda. En un vaso de lágrimas. Propias, ajenas, yo qué sé. Nos ahogamos y punto. Y queremos nadar. Lo intentamos una y otra vez, luchando por salir a flote. Nada de nada. ¿Ahora qué? Pues ahora me he olvidado el paraguas en el subte. Y menudo asco porque hoy llueve. Mucho. Parece que se vaya a terminar el mundo.Hoy es uno de esos días para escuchar "November Rain" aunque sea Septiembre, y criticar a los políticos con el camarero de la cafetería. Y leer las mismas revistas por quinta vez, y faltar a clase.Y querer besar en los labios a Peter Pan.Y querer decirte que Te extraño tanto como si te hubieses marchado para siempre. Lo cierto, es que hoy es uno de esos días en los que tropiezo con la realidad, dejo de corrar detrás de mis sueños, y no me queda otra opción excepto reconocer que sí te fuiste para siempre.Entonces ahora quiero decir algo distinto, como que no me llevo bien con el dolor de tener que esperar; entonces olvido las cosas, como el paraguas que deje en el subte.Algunos días me digo ¡Que más! No importa cuantas veces hayamos dicho que era para siempre; siempre es muy poco tiempo. Y que tengo que empezar la vida..así que simplemente te mando un beso mientras me ahogo en un vaso. Sé que vas a sentir una sensación extraña. Quisiera decir tantas cosas.No te busques en el humo de tu cigarrillo, eso sólo es aire en forma de copo de algodón:no estás ahi.Y Eliot y Poe, no son más que dos poetas, uno alcoholico y otro es Premio nobel... Y los poetas hoy en día no son nada. El mundo nos ha desechado, a pesar de que muchas poesías si tienen entre sus versos la moraleja de la vida.:Vive cada día como si fuese el último, porque uno de estos lo será.Todos tenemos días en los que creemos que el sol brilla más en otra parte, pero debemos mirar hacia el este porque allí está el nuevo sol, apunto de salir.¡Y, por favor, no escuches canciones de amor! La mayor parte esta llena de mentiras, como lo están las despedidas. Nuestra despedida tambien estuvo llena de mentiras. ¿Pero, quién no ha mentido alguna vez? Necesito hablarte, pero te cierras en ti y estás completamente indiferente.No, no respondas, no te enojes. Yo ya me resigne.Supongo que es eso lo que tu quieres que haga; ¡Me ahogo en el vaso! ¿Sabes? Yo tenía razón... el corazón esta hecho para romperse. ¡Pero vamos...! Volvamos a intentarlo, no importa si no sale como lo planeamos.¡Quien no haya fracasado como yo, no tiene ni la más puta idea de hasta dónde se puede creer y caer!.Me gustaría que estuvieras aquí para abrazarme. En el fondo lo sabes.¿Ahora qué? Ahora me compro otro paraguas, para volver a perderlo algún día de lluvia en el que no deje ni por un segundo de preguntarme si estas bien.

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